Ha pasado prácticamente un mes desde que el mundo se detuvo por consecuencia del Covid -19. La situación es compleja en muchos lugares del planeta y a raíz de ello el llamado de las autoridades es evitar las aglomeraciones debido al alto nivel de contagio del virus.
El tenis, como el resto de los deportes (con excepciones como la liga de fútbol bielorrusa) paró en favor de ello, en un hecho que tuvo históricas incidencias, como el traslado de la fecha de Roland Garros hacia el mes de septiembre, o la cancelación de la edición 2020 de Wimbledon, algo que no sucedía desde la Segunda Guerra Mundial. El torneo retornará el próximo año.
El tenis volvería al ruedo el 13 de julio como anunció la Federación Internacional de Tenis (ITF), pero la última palabra la tiene el Coronavirus. Aún queda tiempo para ello y por el momento debemos permanecer en casa.
Hace varias temporadas que Bárbara Gatica (458°WTA singles) vive en São Carlos, Brasil. La integrante del equipo nacional de Fed Cup a comienzos de año se encontraba compitiendo la semana del 9 de marzo en el W25 Olimpia del país brasilero.
Gatica se había instalado en los cuartos de final en singles y dobles, cuando se enteró de la cancelación el certamen.
“Ese día estaba jugando mi partido de segunda ronda, cuando salí de la cancha super feliz de haber ganado, me fui a bañar y me fui a almorzar con mi equipo. Estábamos almorzando para prepararnos para el dobles que se iba a jugar en la noche, cuando vimos un anuncio de la ITF, WTA y ATP que se suspendían los torneos.
Estuve triste y sentía que era un poco injusto no poder terminar esa semana. Me estaba sintiendo bien dentro de la cancha en singles y dobles. Mucho mejor de cabeza y eso no lo sentía hace mucho tiempo”.
Pese a la mala noticia Bárbara tuvo un particular desquite para esa semana.
“Cuando llegamos a cobrar el dinero del torneo nos dijeron que se suspendía todo por 6 semanas. Cobramos y nos fuimos a los toboganes del club porque era dentro de un parque acuático, el más grande de Sudamérica, así que pasamos la tarde en el agua para sacar la impotencia”, ríe la segunda mejor raqueta femenina del país en singles.
Situación similar fue la que vivió Alexander Cataldo (27°ITF). El antofagastino se trasladó a Estados Unidos para competir en el paso del UNIQLO Wheelchair Tennis Tour por suelo norteamericano.
La mejor raqueta masculina nacional del tenis en silla de ruedas logró completar la primera semana de la gira, logrando un vicecampeonato en dobles y una semifinal en singles.
La segunda semana, la del lunes 9 de marzo, ganó su primer duelo individual y de duplas, cuando le avisaron que el campeonato no iba más.
“Jugué un partido en singles el cuál gané y en la segunda ronda me tocaba con el 3 del mundo (el británico Alfie Hewett). Me informaron ese día que suspendían el torneo que estábamos disputando y el de la semana siguiente.
Dije bueno, se perdió una gran oportunidad de medirme con un jugador de enorme nivel. Pero la salud era más importante en ese momento. Luego ya solo queríamos llegar a Chile, llegamos, pasamos por los protocolos correspondientes y a la cuarentena”.
El Covid-19 ha sido letal en Europa, lugar donde se encontraba Leyla Musalem en el inicio de la pandemia por el viejo continente.
Tras un breve paso por Italia, la actual número dos del mundo seniors (+70) arribó al país en las primeras semanas de marzo sin disputar un partido oficial este año.
“Llegue pensando en que serían sólo 15 días, aun así, era una eternidad. Rápidamente esto fue cambiando y me di cuenta que sería eterno. Qué tanto, pensé, hay cosas más terribles, gente que tristemente lo está pasando muy mal. Así mecanicé mi cabeza, no pensar más en mañana, por lo menos seria para mi mucho más llevadero.
Mis mañanas empezaban con las noticias, con el pasar de los días empecé a notar que ver tanto las noticias me hacía daño de diferentes formas, entonces empecé a ver lo mínimo”.
Misma sensación tuvo Cecilia Costa (58°ITF Tenis Playa). La viñamarina que destacara en el tenis tradicional, realizó una gran campaña en el paso del Beach Tennis World Tour por nuestro país a comienzos de año. De ahí, lo que venía eran tres concentraciones junto a un grupo de jugadores nacionales para definir el seleccionado chileno. El Coronavirus dijo otra cosa.
“Estoy entrenando y estudiando, pasando la cuarentena así. Trato de distraerme, ponerme horarios, ver poca noticia. Estudio y entreno, para mí ha sido fundamental todo eso”.
Gracias a Dios nos fue muy bien con Fran (Francisca Zúñiga). Desde un poquito antes del mundial del año pasado que empezamos a jugar juntas y nos hemos ido afiatando muy bien últimamente. Tuvimos la suerte de tener 5 torneos acá en Chile y eso nos permitió quedar 58 del mundo. Fuimos afortunadas en ese sentido ya que no todos los jugadores tienen la posibilidad de sacar ranking en su propio país”.
Durante la tercera semana de febrero se disputó en Brasilia un torneo JB1 del ITF World Tennis Tour Juniors. Ese fue el último campeonato de Jimar Gerald (139°ITF) a nivel juvenil, a consecuencia de la crisis sanitaria que aqueja al mundo.
“Estoy en Chile, en Iquique, no me pude ir a España (Jimar lleva un par de años radicada en la nación europea). No puedo salir de casa así que estoy con puro trabajo físico”.
Guitarreo, una iluminaria rota y cocina; la vida en confinamiento
La cuarentena ha transformado la vida cotidiana de todo el mundo y el caso de estos cinco deportistas no es la excepción.
Diversas actividades completan el día de Bárbara Gatica, que dejó temporalmente São Carlos para instalarse en Petrópolis, lugar donde reside su partner de dobles Rebeca Pereira.
“Desde el comienzo que me vine a Brasil su familia me trata como una hija más y son un gran apoyo aquí para no sentirme tan sola. Sigo haciendo trabajo físico, nuestro entrenador nos manda todos los días una rutina. Estoy haciendo box también con los videos de BXO boxing de Chile, para no hacer las mismas cosas todos los días. Estoy aprendiendo a tocar guitarra y estudiando inglés para aprender perfecto el idioma”.
Cataldo es otro que cayó bajo los encantos del instrumento de cuerdas, además de otros pasatiempos.
“Cuando llegué a Chile me mantuve en cuarentena en Santiago, entrenando normal. Luego me vine a mi ciudad, Antofagasta. Aquí me mantengo con trabajo casero, rutinas a mi alcance, estoy tranquilo y contento. Está cerrado el mall y hay restricción de horario, pero generalmente no salgo de casa.
En mis ratos libres juego play, también harta sobremesa, nos entretenemos, jugamos Monopoly. También estoy tocando guitarra, estoy aprendiendo, llevo dos clases en Youtube” (ríe).
Por su parte, Leyla se las ingenia en su departamento, teniendo que improvisar para mantenerse activa.
“Vivo en el piso 6, entonces después de las cosas domésticas partía a subir y bajar escaleras varias veces. Descubrí que, a pesar que quebré la iluminación del estacionamiento, peloteo allí día por medio, trabajo con elásticos, en fin, lo que sea.
Llevo tres semanas encerrada, afortunadamente hoy conseguí que me pudieran despachar una bicicleta estática, entonces ahí será mejor y podré ejercitarme más. Leo a ratos, y veo bastantes películas”.
Cecilia, cómo Bárbara, también dejó la soledad de su residencia en Viña del Mar para pasar la cuarentena con sus padres en Santiago. La alumna de Ingeniería Comercial en la Universidad Católica de Valparaíso lleva un buen tiempo estudiando desde la casa.
“No ha sido fácil porque este es el segundo semestre que hacemos online. El año pasado con todo el estallido social terminamos con clases online y este semestre empezamos directamente de la misma manera. Para mí ha sido clave organizarme, hacerme horarios para estudiar, entrenar, cocinar. ¡Así como cocinar espectacular nooo, pero obvio que me se defender jajaja morir de hambre eso nunca!”.
El confinamiento para Jimar ha sido una oportunidad para compartir con los suyos.
“Estoy aprovechando de estar con mis hermanos porque no los veo casi nunca. Con ellos vemos Netflix. También estudio y hago el trabajo físico. Veo tenis, pero no muy frecuente”.
Alternativas que han encontrado cada uno de ellos para suplir pegarle a la pelotita. De todos modos existen otras maneras de hacerlo, como hemos visto en redes sociales, incluso ejemplos de su majestad Roger Federer. Para realizarlo dentro de una cancha aún queda un buen tiempo.