Dejamos que Leonardo lo diga con sus propias palabras:

Hoy estuvo todo el equipo visitando al Peli (Jorge Ibáñez) en la clínica. El momento fue muy emocionante porque las circunstancias en que se producía este encuentro eran notables; históricamente no se había vencido jamás a Argentina. Bajo una enorme adversidad, al recibir el abrazo del equipo el Peli se quebró y era muy difícil como ser humano no hacerlo.

Este equipo, independientemente de los resultados, tiene un corazón para apagar todos los incendios de Chile, la humildad, alegría, pobreza e inteligencia con que trabajan, derriten el hielo del más determinista que dice que el tenis femenino chileno no tiene destino.

Hoy en la pieza donde duermen tres y encordan sus raquetas como un artesano más, hacían cada una el análisis de juego, anotando cada punto y situación de juego como lo haría el mejor de los poetas, no pude contener la emoción de ver cómo un grupo de jóvenes chilenas se las arregla para sobrevivir, luchar en la cancha y fuera de ella como las mejores gladiadoras.

Mis respetos por el Peli y su equipo.