Este domingo finalizó el ATP 250 Chile Open, certamen que al igual que en su edición pasada tuvo a nacionales instalados en las rondas decisivas.
Quien destacó de manera especial fue Alejandro Tabilo (51°ATP singles), tras protagonizar los desenlaces individuales y duplas del torneo.
El nacido en Toronto disputó cuatro partidos en el cuadro principal, luego de avanzar bye a los octavos de final. En dicha instancia su oponente fue Tomás Barrios (111°), quien avanzó a segunda ronda luego de eliminar a Cristian Garin (83°).
El chillanejo no pudo en su segundo duelo entre locales, siendo ese partido el inicio de una buena campaña por parte de “Jano”, quien luego eliminó en cuartos al italiano Luciano Darderi (80°) para luego anotarse su mejor victoria en el torneo frente al francés Corentin Moutet (140°), verdugo de Nicolás Jarry (22°) en los cuartos de final.
En un partido cuesta arriba para “Ale”, el chileno logró remontar para finalmente superar al europeo en las semifinales por parciales de 4-6, 6-4 y 7-5 en dos horas y 30 minutos de compromiso.
Desafortunadamente Tabilo no pudo en el partido por el título con un animador habitual del campeonato, el argentino Sebastián Báez (21°). El trasandino, que pasa por su mejor momento profesional, se repuso de un arranque favorable a “Jano” y sumó su segundo título consecutivo (fue campeón del ATP de Río) luego de tres mangas, 3-6, 6-0 y 6-4.
Tabilo (877°ATP dobles) tuvo mejor suerte en el certamen duplas junto al mismo Barrios (735°). El binomio, carta recurrente de Nicolás Massú para Copa Davis, alcanzó su primer título ATP, tras imponerse en duelo entre compatriotas sobre Matías Soto (174°) y el brasileño Orlando Luz (133°) por parciales 6-2 y 6-4.
El copiapino, si bien es cierto no logró el premio mayor, volvió a enfrentar la final de la especialidad del ATP santiaguino de manera consecutiva, reafirmando sus condiciones como doblista. El 2023 también se quedó con el vicecampeonato junto a otro brasileño, Thiago Seyboth Wild.